Muchas veces, para justificarse, uno prefiere atacar, incluso las personas que te dicen ser tus “amigos”.
Cuándo les haces ver que algo no te gusta, que no están actuando como lo tendrían que hacer, que sus comentarios duelen, en vez de entenderlo, se ofenden, por que según ellos no es con maldad, que lo hacen desde el cariño, pero reírse de ti ¿eso es cariño? Que tu no uses una talla 40-42-44 ¿eso es motivo de risa? Será “cariñosamente” pero cuando no es la primera vez que pasa.........
Tienes que aguantar que se sientan ofendidos y dolidos “ellos”, no esta vez no, no voy a disculparme ni pedir perdón por algo que no me siento culpable, demasiadas veces lo he hecho en esta vida, no pienso hacerlo mas, aunque me sienta mal, aunque me duela en el fondo del alma, no es una situación agradable, pero no, esta vez no pienso hacerlo.
Si los demás se sienten mal por mi actitud, que piensen como me siento yo, la protagonista de las burlas y risas. Que piensen en una infancia marcada por el sobrepeso, cargada de complejos, una juventud a base de dietas, siempre pesando la comida, sin poderme dar ningún capricho, sintiéndome siempre distinta a los demás, esas salidas siempre con un plato de ensalada y un vaso de agua, envidiando a los que estaban comiendo pizza o cualquier otra cosa, joder si mis sueños mas pervertidos eran comerme un fuet o una tableta de chocolate. Siendo para todo el mundo la gorda. Después ir viendo como todas las de tu edad se van casando, tu no, por que no aparece el hombre de tu vida o por que simplemente tus complejos hacen que no te puedas acercar a nadie en concreto. Esos complejos que hacen de tu vida un puto infierno, si pasas de la talla 42, que difícil era encontrar ropa para tu edad, ese a sido mi problema desde siempre, ropa grande, solo para mujeres mayores, explícaselo a una niña de 13 años, que pesa 80 kilos, de la que se ríen todos en el colegio. Tu no has elegido ser así.
Por fin cuando ya tienes 29 años aparece “él” quien tu crees que es el hombre de tu vida, pero........... no lo es, te dice que te quiere, que eres única, que se quiere casar contigo, pero al poco tiempo de casarse te dice que te ha mentido, que solo has sido una excusa, una tapadera, que no te quiere y nunca, nunca te querrá, tu luchas, lo intentas por todos los medios, que te respete, que te quiera y no lo consigues,
Al final cansada de todo a los 35 años decides dejar de hacer dieta ¿para qué?. Te ignora igual, te hace ver que eres menos que nada, mucho menos que nada, te destroza como mujer y como persona, aun tarde unos años en convencerme de que era una mujer, una persona.
13 años de insultos y menosprecio acaban marcándote, dejándote marcada de por vida.
He tenido y aun tengo mucha lucha por ese motivo, yo solo quiero que se me acepte como soy, yo misma me rió de mi, pero es una defensa, es mi escudo, por que creo que una persona es mas que un cuerpo, de la gente que hay que reírse al menos para mí, es de la gente que lo tiene todo y pide mas, de la gente que nunca esta contenta, que envidia a los demás.
Intento no hacerle daño a nadie, vivir una vida cuanta más discreta mejor, tratando de no esconderme, pero tampoco exhibiéndome, cuando he ido a una entrevista de trabajo, también he visto en sus caras el decirme ¿dónde va esto?
No soy distinta a nadie, por que pese mas, al menos no lo tendría que ser.